
Las subvariantes BA.4 y BA.55 de Ómicron ahora son las variantes predominantes de COVID-19 en Oregon y en todo Estados Unidos. Esto ha llevado a un aumento de las hospitalizaciones (datos en inglés) relacionadas con COVID-19, incluidas las admisiones en la Unidad de Cuidados Intensivos (ICU, por sus siglas en inglés). BA.4 y BA.5 son ligeramente más transmisibles que la subvariante BA.2 de Ómicron, que era mucho más transmisible que las primeras variantes de COVID-19.
Si bien, es posible que las vacunas actuales contra el COVID-19 no protejan a todos de contraer el virus, siguen siendo efectivas para prevenir enfermedades graves y la muerte. Todas las personas mayores de 6 meses son elegibles para recibir una vacuna contra el COVID-19, por lo que familias enteras pueden estar mejor protegidas contra el virus.
Los científicos aún no están seguros de si BA.4 y BA.5 causan una enfermedad más grave que las variantes anteriores.
“Las hospitalizaciones están aumentando porque más COVID-19 se está propagando en nuestras comunidades y porque la inmunidad a nivel comunitario ha disminuido desde el aumento inicial de Ómicron el invierno pasado”, dijo Melissa Sutton, directora médica de patógenos virales respiratorios de Oregon Health Authority (OHA, por sus siglas en inglés). La inmunidad de una infección por COVID-19 puede durar sólo unos meses. A medida que pasa el tiempo después de que alguien se infecta, más personas vuelven a ser susceptibles a la infección, lo que hace que el virus se propague más ampliamente.
Propagación de la enfermedad
“Los casos registrados se acercan a los niveles observados durante el pico de Delta, pero sabemos que solo estamos detectando una pequeña fracción de casos en general”, dijo Sutton.
Para determinar el alcance de la propagación del virus, los expertos de OHA observan la tasa de positividad (datos en inglés) de la prueba o “el porcentaje de positividad”, que muestra qué proporción de las pruebas dan positivo y es una medida más precisa de la transmisión de la enfermedad que las tasas de casos. El porcentaje de positividad se ha utilizado tradicionalmente para controlar la propagación estatal de otros virus respiratorios, como la gripe). Si el porcentaje de positividad aumenta, los científicos saben que el virus se está propagando más. Los expertos también analizan los datos de vigilancia de aguas residuales (datos en inglés), que muestran los niveles de virus en toda una comunidad. Nuevamente, si esos números aumentan, es probable que el virus se esté propagando más.
La semana pasada, la Universidad de Ciencias y Salud de Oregon (OHSU, por sus siglas en inglés) publicó un nuevo pronóstico (datos en inglés) sobre cómo el COVID-19, específicamente sus subvariantes BA.4 y BA.5, puede afectar a los habitantes de Oregon. Hasta la semana pasada, 423 personas estaban en el hospital con COVID-19, y OHSU predice que ese número alcanzará un máximo de 479 a mediados de julio.
Manteniéndose seguro
Como con cualquier variante de COVID-19, hay formas de protegerse. Lo más importante es asegurarse de estar completamente al día con todas sus vacunas y refuerzos. Aunque puede infectarse con BA.4 y BA.5 a pesar de la vacunación, las vacunas siguen siendo muy eficaces para estar protegido contra enfermedades graves y la muerte.
También considere usar un cubrebocas en lugares públicos cerrados, como tiendas, cines o gimnasios, y prefiera realizar sus actividades sociales al aire libre, ya sea en su patio, un parque o el área abierta de un restaurante. Cuando use un cubrebocas, elija uno que le quede bien ajustado y le brinde un alto nivel de protección. También puede y usar un cubrebocas de tela sobre una máscara quirúrgica (no al revés).
Si planea visitar a alguien inmunocomprometido o vulnerable o una enfermedad grave, considere tomar precauciones extra, incluido hacerse una prueba antes de su visita, aunque no tenga síntomas.